"Hasta que venga algún criollo a esta tierra a mandar"
En el reciente discurso de la compañera Cristina el pasado domingo, en ocasión del holgado triunfo electoral, no olvido hacer referencia al que describió como su "compañero de toda la vida". Ni más, ni menos que eso. Un compañero. Aquella dupla de militantes que se conoció en la universidad de la Plata en los años setenta, y que con el tiempo se convertirían en esta pareja política que indudablemente pasará a la historia. No se olvido de contarnos, Flaco querido, de tu vocación para ayudar a los demás, de como dabás cada aliento que tenías en procura del binestar general del pueblo y la Argentina. Nos dijo también, que se te fué la mano negro. Que tenías buenas intenciones, si, pero que tu salud estaba jodida. Los médicos te decían que pares, que te tomés un tiempo para descansar...pero no lo hiciste. Pero no importa! Porque sabemos a ciencia cierta que cerrando tus ojos, abriste miles. La puta oligarquia y los gorilas cipayos festejaron (descorchando un champagne como con la muerte Evita, tal vez?) porque los ilusos creyeron que sin vos el proyecto se había terminado, que Cristina no iba a tener la fuerza para seguir. Que iba a tener que "tranzar" con los medios oligopólicos y los mismos grupos de poder de siempre. Pero no, el pueblo copó la plaza para despedirte, demostrando fehacientemente que APOYABAMOS el modelo. Y así, entre llantos, bombos y cánticos, uno a uno fuimos entrando en la casa rosada para darte un último adiós y gritarle "Fuerza Cristina!" cuando muchas veces nosotros mismos teníamos un nudo en la garganta. Fueron muchas horas de espera hasta poder pasar, pero valió la pena, porque sabemos que gracias a ello, el proyecto tuvo el respaldo suficiente para poder seguir adelante.
En lo personal, no voy a olvidar el día en que nos enteramos de la nefasta noticia. Estaba durmiendo cuando me llegó el mensaje de un amigo diciendome "te vas a querer matar, se murió Néstor". Al principio no entendí de que me hablaba, hasta que prendí el televisor y vi esa placa horrorosa que rezaba "Murió Néstor Kirchner". El grito que pegué hizo a mi vieja saltar de la silla de la computadora. Que forma terrible de empezar la mañana. Me acuerdo que recibí varios llamados para preguntar como estaba. Una mezcla entre tristeza y furia me invadia. Tristeza por la partida de nuestro conductor, furia por la fiesta de los gorilas que ansiaban ese momento. Me peleé con medio mundo en el facebook, pero también descubrí al otro medio mundo que estaba de acuerdo conmigo, y eso me reconfortó un poco. Al día siguiente, fuí temprano para la plaza de Mayo y cuando vi a toda aquella multitud, pasé de la tristeza a la alegría. Descubrí que había todo un pueblo que no caía en las mentiras de los poderosos...
Gracias Néstor por hacerme volver a creer en la política!. Toda una infancia creyendo que todos los héroes ya eran piezas de museo, toda una infancia pasando las mil y una dificultades para llegar a fin de mes, acordarme de mi viejo llevandole vidrios y cartones viejos que teníamos en casa al reciclador para poder tener algo que comer me hicieron creer que recién iba a poder conocer lo que era la tranquilidad económica una vez que fuera un profesional recibido, pisando ya los 40. Pero no, me demostraste ser mi único héroe en este lío llevando el país hacia adelante, hacia una prosperidad que no se vivía desde hacía muchisimos años. GRACIAS NÉSTOR POR TODO LO QUE PUDE CONSEGUIR EN ESTOS AÑOS! SEGUÍ TRANQUILO MIRANDO DESDE EL COMANDO CELESTE, QUE DESDE ACÁ VAMOS A SEGUIR ENARBOLANDO TUS BANDERAS! MANDALE UN CALUROSO SALUDO A EVITA, EL CHE, EL TÍO Y AL GENERAL!
NÉSTOR NO SE MURIÓ, NÉSTOR NO SE MURIÓ, NÉSTOR VIVE EN EL PUEBLO LA PUTA MADRE QUE LO PARIÓ!
...y puta que no es de hombres llorar, pero miento si no digo que estuvo a punto de caerseme una lagrima mientras escribia esto...
TE EXTRAÑAMOS, FLACO...
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